No cortes , ni compres las palmas de cera. Están en peligro de extinción.
Las palmas de cera. Su nombre aduce a su primer uso: la cera raspada sirve para hacer velas, las cuales seguramente acompañaron la colonización de las montañas. Antes de la colonización eran muy abundantes y parecieron inagotables. Hoy, en el ecosistema, a más de 50 metros por encima del bosque de nubes los racimos rojos atraen al Loro Orejiamarillo (Ognorhynchus icterotis) a punto de desaparecer. Palma de cera y Loro Orejiamarillo representan un par ecológico severamente amenazado.
Para los católicos, el Domingo de Ramos es la representación de la entrada triunfante de Jesús a Jerusalén. Por eso, tener el ramo bendito en casa es una costumbre ancestral que miles de personas conservan.
Desde agosto de 2002, el Ministerio del Ambiente (MAE) oficializó el listado de plantas endémicas en peligro de extinción, así que prohibió su comercialización y transporte. Entre ellas están las especies Ceroxylon amazonicum, Ceroxylon echinulatum, Ceroxylon parvum y Ceroxylon ventricosum, todas empleadas en la elaboración de los arreglos para el Domingo de Ramos.
El dilema entre tradición cristiana y conservación ambiental viene de años. La palma de cera es un símbolo de fe que muchos consideran infaltable en la Semana Mayor. Sin embargo, la tala indiscriminada de dicha especie en esta temporada la ha puesto en “lista roja” o de peligro, debido a lo cual no se permite su venta.
Por ello, el Ministerio del Ambiente y la Conferencia Episcopal Ecuatoriana establecieron un acuerdo para trabajar juntos por la conservación de las especies silvestres, a través de la emisión de mensajes de concienciación a los feligreses, para que no utilicen la palma de cera.
Según la Unidad de Protección del Medio Ambiente (UPMA) de la Policía Nacional, la extracción y comercialización de especies en peligro de extinción están tipificadas como delito en el Código Penal, con sanciones de 1 a 3 años de reclusión para quien viole esta disposición.
No cortes ni compres Palma de Ramos, están en peligro de extinción y ahí habitan los loros orejiamarillos.
Fundación Ecosol
Para los católicos, el Domingo de Ramos es la representación de la entrada triunfante de Jesús a Jerusalén. Por eso, tener el ramo bendito en casa es una costumbre ancestral que miles de personas conservan.
Desde agosto de 2002, el Ministerio del Ambiente (MAE) oficializó el listado de plantas endémicas en peligro de extinción, así que prohibió su comercialización y transporte. Entre ellas están las especies Ceroxylon amazonicum, Ceroxylon echinulatum, Ceroxylon parvum y Ceroxylon ventricosum, todas empleadas en la elaboración de los arreglos para el Domingo de Ramos.
El dilema entre tradición cristiana y conservación ambiental viene de años. La palma de cera es un símbolo de fe que muchos consideran infaltable en la Semana Mayor. Sin embargo, la tala indiscriminada de dicha especie en esta temporada la ha puesto en “lista roja” o de peligro, debido a lo cual no se permite su venta.
Por ello, el Ministerio del Ambiente y la Conferencia Episcopal Ecuatoriana establecieron un acuerdo para trabajar juntos por la conservación de las especies silvestres, a través de la emisión de mensajes de concienciación a los feligreses, para que no utilicen la palma de cera.
Según la Unidad de Protección del Medio Ambiente (UPMA) de la Policía Nacional, la extracción y comercialización de especies en peligro de extinción están tipificadas como delito en el Código Penal, con sanciones de 1 a 3 años de reclusión para quien viole esta disposición.
No cortes ni compres Palma de Ramos, están en peligro de extinción y ahí habitan los loros orejiamarillos.
Fundación Ecosol