Wiphala, bandera de los pueblos de los andes.
Fractal de la chakana
La chakana o chaka hanan significa el “puente a lo alto”. Es la denominación de la constelación de la Cruz del Sur, y constituye la síntesis 
de la cosmovisión andina. 

Significado de la Chacana o Cruz Andina

Desde el pensamiento andino, la chakana es la representación de un concepto que tiene múltiples niveles de complejidad de acuerdo a su uso. La chakana o chaka hanan significa el “puente a lo alto”. Es la denominación de la constelación de la Cruz del Sur, y constituye la síntesis de la cosmovisión andina, asimismo, es un concepto astronómico ligado a las estaciones del año.

Juan de Santa Cruz Pachacuti Yamqui Salcamaygua, cronista, en su “Crónica de Relación de Antigüedades de este Reino del Pirú” dibujó e insertó un grabado sobre la cosmovisión andina, que se encontraba en el Altar Mayor del Templo del Coricancha en Cuzco, al cual denominó Chakana, el puente o escalera que permitía al hombre andino mantener latente su unión al cosmos.

“La cruz andina es la cruz cuadrada que nosotros llevamos cargando”, dicen los comuneros. En Cuenca, esta cruz asoma por febrero sobre Turi, es una cruz de estrellas que permanece durante la noche, gira al sur un poco, pero a las cinco de la mañana desaparece y nuevamente sale al anochecer, eso dice taita Yaku Samay, quien ha seguido de cerca los movimientos de la cruz de estrellas, y por ello sabe que hay tiempos cuando esa cruz sale también a las diez de la noche.
Símbolo de la cosmogonía Kitu -Karamki, representando
 el centro como espacio vital y la disribución
desde lo social, económico, político, y espiritual
Esa es la cruz del sur que los taitas veneraban y amaban. Los sabios de las comunidades indígenas cuentan que, otrora, cuando ella salía mucha gente se reunía en la montaña para venerarla. Ellos, los antepasados dibujaron la chacana y pusieron la cruz en la mitad y todo lo que es femenino a la derecha y lo que es masculino a la izquierda.

“Esta cruz permanece en el cielo girando hacia el sur”, dicen los taitas, y señalan que es muy diferente a la cruz católica; símbolo cristiano más alargada hacia la parte baja, que llegó con la conquista española y en base a esa cruz, los europeos iniciaron un proceso de evangelización a los abuelos.

La interpretación a la chakana

Sujeto a varias interpretaciones y haciendo compatible la estructura básica que dejó el cronista Yamqui Salcamaygua, con los comportamientos del hombre andino, las conclusiones más aceptadas sobre la figura de la chakana son múltiples; entre ellas se destaca que: la chakana (puente o cruce) aparece en la intersección o en el punto de transición de las líneas trazadas de arriba hacia abajo o viceversa, verticalmente, y de izquierda a derecha o viceversa, horizontalmente.

Habría dos “espacios sagrados” que se oponen mutuamente: el primero, de proyección vertical, dividido en una mitad masculina y en otra mitad femenina; el segundo, de proyección horizontal, dividido en una mitad de los “seres celestiales” y en otra mitad de los seres “terrenales y subterráneos”.

La orientación de arriba hacia abajo tendría connotaciones masculinas, y la de abajo hacia arriba, connotaciones femeninas. La chakana tiene la forma de una X, las diagonales conectan las 4 esquinas de la “casa”, es decir, del universo. La chakana es el símbolo andino de la relacionalidad del todo.

La línea vertical expresa la oposición relacional de la correspondencia entre lo grande y lo pequeño: “tal en lo grande, tal en lo pequeño”. El espacio sobre la línea horizontal es el Hanaq Pacha (mundo de arriba, “estrato superior”). El espacio que queda por debajo de la línea horizontal es el Kay Pacha (este mundo). Los canales de comunicación que existen entre los dos mundos, son los manantiales, lagunas, montañas.

Hay en ella múltiples relaciones de correspondencia y complementariedad, como por ejemplo entre el techo y el suelo, entre el sol y el fuego, entre el día y la noche y entre el varón y la mujer, que indican el derrotero a seguir para descubrir que en su construcción no cuentan únicamente las razones utilitarias. Todos los objetos en ella tienen razón de ser, ninguno está por demás.
Simbología de posibles chakanas, encotrados en pecheras
de la cultura Cañari de Ecuador, inscritos en el
libro El Oro de Cuenca, Ecuador, de Marshall Saville 

El sincretismo religioso entre la cruz católica y la Chakana
Venerar la cruz católica es parte del sincretismo religioso que se dio en los pueblos de América, por ende el tres de mayo, algunas comunidades indígenas celebran y veneran la fiesta de la Cruz. Se dice que la invención de la “Santa Cruz”, es conmemorada desde tiempos antiguos. En España aparece en todos los calendarios y fuentes litúrgicas mozárabes, poniéndola en relación con el relato del hallazgo por Santa Elena de la auténtica Cruz de Cristo.

En los pueblos andinos tributar a la cruz católica es tratar de encontrar el propio camino. “Si usted se pierde en el camino, no puede seguir; por ende vuelve al inicio para saber cuál es el camino original”, dice Yaku y explica que el tres de mayo no tiene ninguna relación entre el cosmos y la presencia de la cruz del sur, situación que si es evidente en los cuatro raymis que se celebra en el año. Para Samuel Lojano, otro líder comunitario, la cruz andina es una símbolo milenario del Hatun Taita y de la Hatun Hama, (el gran padre y de la gran madre) que en América se expresó desde el comienzo de la vida y por eso todos los pueblos andinos lo tienen como uno de sus símbolos motivo de devoción y a través de él velar por el respeto a la Pachamama.

La cruz andina es la imagen que invita a la convivencia con la naturaleza, a respetar el agua y todo lo que la madre tierra hace para dar el alimento a sus hijos. “La chacana significa nuestra vivencia, y como debemos conservar a la madre naturaleza para nuestros hijos, nietos y para todos los que vienen”, asevera Samuel. Es de ver como los taitas cuelgan de su cuello una cruz andina. Taita Yaku esculpió su propia chacana en madera de palosanto. Es una chacana que tiene su parte blanca y su parte oscura, así es como representa la dualidad, ya sea el bien y el mal, hombre y mujer, etc.

Es una cruz del tamaño de la palma de la mano que en el centro lleva el sol que brilla con la luz. Ese sol es el símbolo del Taita Inti o Padre Sol, el padre físico que permite la existencia de todo el planeta. “El taita sol es el esposo de la madre tierra, el padre que da calor a la humanidad”, dicen los conocedores. “Sin el sol no habría luz, calor, no existiría la fotosíntesis, el sol da calcio a los seres humanos. Sin el sol sería el fin de la tierra, planeta que recibe su luz”, dice Yaku. (BSG)-(Interculturalidad)

Investigación: El Mercurio